En un emotivo acto celebrado el martes 10 de junio en la Sede Oro Verde, la Facultad de Ciencia y Tecnología (FCyT) de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER) rindió homenaje a dos referentes indiscutibles de su historia institucional: el Prof. Marino Schneeberger y el Ing. Juan Luis Bózzolo, quienes recibieron el título de Profesores Universitarios Honoríficos.
La distinción, de carácter excepcional y prevista en el Estatuto de la Universidad, reconoce a quienes, por su trayectoria, compromiso y valiosas contribuciones, han dejado una huella profunda en la comunidad académica y en la sociedad. La iniciativa fue impulsada por la FCyT en el marco del 25° aniversario de la Universidad, con el objetivo de honrar a quienes acompañaron desde los inicios el crecimiento y consolidación de esta casa de estudios.
El acto, encabezado por el rector de la UADER, Abog. Luciano Filipuzzi, y el decano de la FCyT, Esp. Juan Pablo Filipuzzi, contó con la presencia de la vicedecana de la FCyT, Mg. Adriana Gras, autoridades universitarias, docentes, estudiantes, personal administrativo y familiares de los homenajeados.
Seguidamente a la lectura de las resoluciones que dan marco al homenaje, las autoridades dirigieron sus palabras a la comunidad.
En primer término lo hizo la vicedecana de la FCyT, Mgs. Adriana Gras, quien destacó las figuras de los homenajeados: “Ambos han dejado un legado trabajando incansableblemente por la Facultad de Ciencia y Tecnología y por dejar bases sólidas en pos de una educación pública de calidad fuertemente arraigada con el territorio.” En relación al acto, Gras sostuvo: “Este momento no es solo una forma de agradecer a su trayectoria es también un gesto de gratitud profunda por tanta entrega”. Seguidamente dió lectura a un cálido mensaje redactado por la comunidad educativa de Concepción del Uruguay dirigida al Ing. Bózzolo.
Por su parte, el decano, Esp. Abog. Juan Pablo Filipuzzi, expresó: “Hoy reconocemos a dos docentes muy queridos de la Facultad, no solo por la trayectoria de haber formado estudiantes y docentes en las aulas, sino también por su conducción institucional y política, su compromiso con la Facultad y la Universidad”. Reconoció que los períodos de gobierno de Bózzolo y Schneeberger fueron los de mayor crecimiento tanto por la construcción de edificios propios como por la acreditación de carreras ante la CONEAU. “Este homenaje no es solo una ceremonia: es una declaración de principios. Estamos convencidos de que debemos reconocer a las personas que dejaron parte de su vida en la institución y en la gestión”. Como cierre el decano retomó el lema de los 25 años: UADER: Una Universidad que Transforma y se dirigió a los homenajeados: “Ustedes han transformado la vida de muchísimas personas. Muchas gracias”.
También se dirigió a los presentes el rector de la Uader, Abog. Luciano Filipuzzi, quien luego de agradecer y destacar la presencia de la comunidad universitaria se refirió a los homenajeados como dos pilares fundamentales en la construcción de esta Facultad y de la Universidad Autónoma de Entre Ríos: “Hablar de Juan y de Marino es contar un poco la vida de esta Universidad y la historia viva a la cual hemos llegado”. “ Hoy UADER es la Universidad Pública más grande en cuanto a cantidad de alumnos de la provincia de Entre Ríos, la Universidad Pública Provincial más grande del país y eso solo se logró en 25 años” “Ellos (refiriéndose a Bózzolo y Schneeberger) hicieron que la universidad sea respetada, tenga reconocimiento y sea una de las más valoradas; y lo avalan los miles de estudiantes que nos eligen. En nombre de la comunidad universitaria: gracias por todo lo que nos dejaron”
Durante la ceremonia, se firmaron y entregaron los diplomas y resoluciones que avalan el reconocimiento, en un momento cargado de simbolismo y gratitud. Tanto Bózzolo como Schneeberger fueron convocados al frente para recibir el diploma y compartir una foto conjunta, sellando así este hecho histórico: es la primera vez que la FCyT y la UADER otorgan esta distinción.
Seguidamente se realizó la entrega de obsequios institucionales por parte de integrantes del claustro administrativo, en un gesto cargado de afecto y cada homenajeado hizo uso de la palabra en alusiones cargadas de emoción y agradecimiento.
El Profesor Universitario Honorífico, Juan Luis Bózzolo, comenzó agradeciendo la designación y dijo: “Esto es muy significativo. La Universidad, la UADER para mí, ha sido mi vida (…) y esto tiene un justificativo porque uno la vio nacer: desde que había un decreto de creación solamente y ahí apostamos. Apostamos ciegamente desde el principio”. Luego de un recorrido que dio cuenta de su tránsito por la institución, Bózzolo cerró sus palabras diciendo: “Quiero agradecer a todas las personas que me acompañaron (…) Estamos en el presente y miramos hacia adelante. (…) Estamos esperanzados. Creemos que la Facultad está creciendo enormemente y está obteniendo logros y para nosotros es una satisfacción haber sido parte de lo anterior y que ahora viene la etapa de crecimiento”. La dedicación final fue a su familia: su esposa, tres hijas y sus padres.
A su turno, el Profesor Universitario Honorífico, Marino Schneeberger, celebró: “De vuelta acá, una vez más, después de tantos años, de colaciones, de actos. La verdad que es un gusto, es muy emocionante saber que se reconoce la tarea, el esfuerzo que uno hizo”. “Muy agradecido y con una gran responsabilidad, porque obviamente ser de los primeros profesores Honoríficos de la Universidad no es gratuito tampoco, implica que uno asume de aquí y mientras viva una responsabilidad institucional”. Su principal agradecimiento fue a su familia: su esposa e hijos y los reconoció como lo mejor de su vida: “Siempre la contención vino de casa”.
Schneeberger reflexionó: “El trabajo que nos ha tocado hacer es muy grato, si bien es cierto y comparto todo lo que ha dicho de todas las dificultades que nos ha tocado atravesar, visto en perspectiva desde hoy hacia veintipico de años atrás: han sido grandes satisfacciones en realidad.” Al cerrar su alocución mencionó “Yo creo que el tiempo no transcurre porque sí, y las cosas tampoco suceden porque sí.Uno tiene que pensar, tiene que planificar, tiene que accionar con todo eso que piensa y planifica” y trajo a colación categorías de José “Pepe” Mujica: “Nada es válido si no se tiene en cuenta el pensar, el sentir, el hacer”. Y yo creo que esa es la clave de lo que uno proyecta: hay que pensar para formularse objetivos claros. Hay que sentir para valorar, para evaluar esos objetivos y delinear cuál es el camino y finalmente hay que accionar, hay que poner manos a la obra y trabajar. Entonces cuando el pensar el sentir y el hacer se conjugan, seguramente se obtienen logros como es el logro de esta querida y bendita Universidad Autónoma de Entre Ríos”
Como cierre, el coro de la Facultad ofreció una interpretación artística que reforzó la calidez y emotividad del encuentro.