Días pasados, la Vicedecana de la Facultad de Ciencia y Tecnología, Mg. Adriana Gras, junto con la Coordinadora de Sede local, Esp. Prof. Carolina Miño, llevaron a cabo una reunión con la Coordinadora de Economía Circular de la Municipalidad de Concepción del Uruguay, Aldana Farabello. En este encuentro se destacó la relevancia de la colaboración entre la universidad y el Estado local para abordar problemáticas sociales y ambientales que afectan directamente al territorio.
Uno de los principales ejes de la conversación fue la posibilidad de trabajar en conjunto en un proyecto que articule la academia y el Estado, con la participación de diversos actores sociales, con un enfoque específico en la sensibilización, concientización y capacitación en la gestión de residuos. Este proyecto se desarrollaría bajo el marco de una Práctica Educativa Territorial, una modalidad que permite que los/as estudiantes sean los principales protagonistas en su ejecución, promoviendo no solo la formación académica, sino también el compromiso social y la generación de ciudadanos responsables y comprometidos con su entorno.
La extensión crítica juega un papel fundamental en este tipo de iniciativas, ya que permite que la universidad se conecte de manera directa con las realidades locales, contribuyendo a resolver problemas concretos del territorio mientras promueve el pensamiento crítico y la participación activa de los/as estudiantes en la transformación social. De esta manera, se fomenta una educación que forma profesionales competentes, y a la vez genera un impacto positivo en la comunidad y en la construcción de un futuro más sostenible y equitativo.
Este proyecto, además de consolidar la colaboración entre la universidad y el Estado, ofrece una oportunidad única para que los estudiantes se involucren en la resolución de problemas reales, aplicando sus conocimientos y desarrollando habilidades que los preparan para enfrentar los desafíos del mundo actual, con un fuerte compromiso con la sociedad y el medio ambiente.
La articulación entre la academia y el Estado es esencial para avanzar hacia un futuro en el que el conocimiento y la acción conjunta generen soluciones sostenibles, fortaleciendo el vínculo entre la universidad y la comunidad.